Llegamos a Cabañeros por Navahermosa y al poco empezamos a disfrutar de las curvas y del paisaje. Ibamos a un ritmo tranquilo, deleitándonos con todo lo que nos rodeaba. Es un disfrute para los sentidos montar en moto por esa zona si además se hace tranquilamente.


.... y subimos el Risco de las Paradas....


Lo bajamos ya por el lado sur.

Uno de los pocos lugares habilitados para parar, lo aprovechamos para descansar y disfrutar del sitio.



Veasé la maravilla de asfalto y de curvas.

Seguimos marcha y llegamos al sitio elegido para comer en Retuerta del Bullaque. Una buena terraza con mucha mucha separación entre mesas y con las motos enfrente. ¿Que más se puede pedir?
Excelente parrillada de verduras y venado en salsa mejorable. El postre era una exquisita tarta de queso.


Tras la abundante comida y buen ratejo toca ponerse en marcha. Vamos allá!!

Tras repostar tocan las rápidas curvas del Milagro


Llegamos a casa antes de las cinco con muy buen sabor de boca, unos 260 kilómetros. Una gozada poder dar rueda a Marijose, siempre es un placer rodar con ella.
Preparando la siguiente......